Ayer estaba agotado y no me apetecía ni escribir ni tampoco escuchar audiolibros de ciencia ficción, de modo que me di una vuelta por Steam. A ver qué había. No mucho por el momento. Sin embargo, me encontré con una demo de un juego de supervivencia zombie, y me dije «¿Por qué no». Además, era gratis (porque se trata de una demo de una hora o algo así) y afirmaba mezclar hordas con gestión de recursos. Economía y ciencia ficción. Me gusta esa combinación. Así que decidí darle una oprtunidad. Esta mi opinión sobre Infection Free Zone: Prologue.

¿Qué es Infection Free Zone: Prologue?

Un juego de estrategia en tiempo real en el que controlamos un grupo de supervivientes que tratan de convertir su localidad en una Infection Free Zone. Lo de la localización parece que apunta maneras, pues en la demo hay una limitada opción, pero en el juego completo podrás elegir otras localidades, incluida tu ciudad, lo cual le añade una capa de interés al videojuego.

Obtener recursos, gestionar población, explorar secciones del mapa… Probablemente resolver algún misterio. En otras palabras, construir una base en la que subsistir oleadas de infectados. ¿Infectados con qué? Aquí es donde el juego se pone atractivo, al menos para cierto público.

¿Zombies o vampiros?

El término zombie se utiliza muy a la ligera estos días. Así que busquemos precisión. En la presentación se habla sobre el Virus Loco, que provoca una sed de sangre entre los infectados. ¿Recuerdas la película, que está inspirada en un libro, Soy Leyenda? Pues ese tipo de infectados podemos esperar, más cercanos a los vampiros que a los zombies. Pues estas criaturas corren que se las pelan, siempre hacia las víctimas en su línea de visión, y buscan refugio en interiores una vez cae la noche. Sí, diría que son vampiros.

Y por si quedaba alguna duda, el poster promocional está claramente influenciado por la película que protagonizó Will Smith. Con esa palidez en la piel y esa ausencia de pelo.

Continuidad con los juegos de la compañía

Los creadores de Infection Free Zone pertenecen a la compañía Jutsu Games, entre cuyos título está 911 Operator, un juego sencillísimo sobre responder a emergencias tales como accidentes de tráfico, robos o un niño que pide ayuda a la policía para resolver sus deberes de Matemáticas.

Menciono esto por el curioso y cuidado detalle de que uno de los DLC de ese juego trata sobre un aviso de emergencia sobre una extraña enfermedad que torna agresivos a los infectados. El estudio establece así un vínculo entre el brote y el colapso de la sociedad, con este juego de supervivencia. Bonito detalle.

¿Cómo se juega a Infection Free Zone?

El juego, bastante sencillo, consiste en acumular recursos. Dispones de una población inicial —los supervivientes que se refugiaron contigo en el búnker—, y tras tres años, regresáis al exterior, motivados por un mensaje de radio que informa sobre que la infección está en declive —mentira, seguro— y es más o menos seguro salir.

Esa población se reparte en escuadras y trabajadores, con los primeros saquearemos edificios no tan abandonados y lucharemos contra hordas de infectados; los segundos cultivan la tierra, recolectan materias primas o derriban edificios para obtener materiales de construcción. Supongo que te haces una idea.

Se rige por un reloj de día (seguro) y noche (hordas, cuya peligrosidad ni se acerca a la de Aliens: el regreso) y un paso del tiempo marcado en meses (inviernos sin cosecha) y la demo no permite avanzar más allá del primer invierno, por lo que no me ha dado tiempo a desarrollar tecnologías (radio y armas, por ejemplo), aunque sí encontrar supervivientes y coches en funcionamiento (buen detalle, la capacidad de conducir de un lado a otro, con el maletero lleno de recursos y el parachoques abollado de tantos infectados que he atropellado).

Supongo que adivinas por dónde van los tiros del juego. Nada del otro mundo, pero entretenido.

¿Merece la pena comprar Infection Free Zone?

Si es muy barato, sí. Es un juego sencillo, de sota, caballo y rey, con escasa innovación tras la sorpresa inicial y algún detalle (el coche, por ejemplo) pero no aspirará a ningún premio, y es posible que olvides tras unas cuantas partidas. Entretenido. Sin más.

Por eso digo que si es barato, tal vez merezca la pena para matar algunas horas de tiempo libre. Aunque en mi caso no lo haré, porque estoy ocupado escribiendo mi próxima novela —lo lamento, equipo, se trata de una novela de fantasía y no entrará en el listado de esta web— y otras actividades, como tal vez una relectura de Guerra Mundial Z, de modo que no le dedicaré tiempo a un juego como Infection Free Zone. Pero, claro, para gustos, tortilla de patata con o sin cebolla, así que no pretendo desanimarte a que lo pruebes.